Repasando mi última contribución a NeG y reflexionando sobre lo que han comentado de ella vari@s amig@s, he pensado que quizá sería bueno remachar algunas de las ideas avanzadas en esa entrada.

My generation

Nuestra generación heredó dos modelos teóricos muy abstractos a saber el de Equilibrio General y el de Teoría de Juegos. El primero compactificaba la herencia neoclásica. El segundo resolvía un problema que había torturado a estos (no lo habría hecho tanto si hubieran hecho más caso a Cournot y a Edgeworth), el llamado "problema del oligopolio".

Bebiendo en estos dos modelos y con mucho curro teórico y empírico, en mi generación se han creado unos campos que hoy pueden servir para llenar un curso semestral de grado avanzado o un curso trimestral de segundo año de master o de doctorado (ver por ejemplo el programa de grado de la UC3M).
Estos nuevos campos se suman a los que ya existían, como crecimiento y desarrollo, historia económica, economía regional, economía internacional e historia de las doctrinas. De los nuevos, destaco éstos:

- Economía pública
- Economía política
- Desigualdad y pobreza
- Economía del medio ambiente
- Organización industrial
- Economía laboral
- Economía de la educación
- Economía de la información
- Economía de los contratos
- Regulación e impacto económico de las leyes
- Economía del riesgo y la incertidumbre y/o finanzas
- Elección social
- Economía de la salud

y otros que están a punto de cuajar (si no lo han hecho ya) como la economía del comportamiento, la economía de los conflictos, la de plataformas y redes (networks), la geografía económica y la economía experimental. Sobre esta última voy a decir unas palabritas.

La economía experimental

La economía es una ciencia experimental desde hace bastantes décadas.

- En 2002 Vernon Smith consiguió un Nobel "por haber establecido los experimentos en el laboratorio como una herramienta en el análisis económico, especialmente en el estudio de mecanismos alternativos al mercado".

- El Nobel de Alvin Roth en 2012 reflejó parcialmente su trabajo experimental "Roth pudo corroborar sus conclusiones sistemáticamente en experimentos de laboratorio".

- En 2019 el Nobel recayó en Abhijit Banerjee, Esther Duflo y Michael Kremer "por su enfoque experimental para aliviar la pobreza global."

- Por último, este año el Nobel recayó en David Card, Joshua D. Angrist y Guido W. Imbens "por mostrar qué conclusiones sobre causa y efecto se pueden obtener de los experimentos naturales"([2]).

Muchos de los buenos departamentos de economía en España tienen espacios destinados a laboratorios donde nuestros conejitos de indias (a veces estudiantes, a veces no) se ven sometidos a experimentos remunerados de los que salen, a veces, jugosos papers. Un excelente survey de la economía experimental que se hace en España se debe a mi compi de departamento y NeG José Luis Ferreira. Aquí el lector puede encontrar las numerosas entradas que hemos publicado en NeG sobre este tema. Un libro muy reciente sobre el estado de la economía experimental es éste que, aviso, no he leído aún.

¿A qué viene todo este despliegue? Pues que en mi crítica a la falta de trabajo en el problema del ajuste al equilibrio olvidé mencionar los resultados experimentales que se han obtenido en éste área. Un survey de Sean Crockett ya un poco antiguo (2013) concluía que "las teorías clásicas de la dinámica salen bien paradas. Estos experimentos sugieren que el subastador Walrasiano, por ejemplo, aparece como una "constructive abstraction"". Un trabajo más reciente de Charlie Plott (candidato eterno al Nobel) y otros (Economic Theory (2021) 71:1033--1084) remacha que "El trabajo experimental previo al nuestro demuestra el poder de las teorías clásicas de la dinámica económica para caracterizar el equilibrio en sistemas con múltiples mercados". Y este artículo constata que cuando se reconstruye en el laboratorio una economía en el que el tatonement Walrasiano no converge, los datos replican bastante bien la predicción teórica. O sea que trabajo interesante sí que se ha hecho. Lo cual nos lleva a mi última reflexión.

Comprobando la convergencia al equilibrio...

 

La replicación de los resultados

Absolutamente imprescindibles en una disciplina que desea ser ciencia. La razón no es necesariamente el engaño (que lo hay). Es que hay datos que no se introducen o programas que no se ejecutan como deberían. Hay correlaciones que se interpretan como causalidad. Se sacan conclusiones con muestras pequeñas, no se calculan los intervalos de confianza de los parámetros, ni se estudian si los residuos tienen las propiedades que tienen que tener, o si las variables explicativas son o no significativas, etc. Lo mismo puede decirse de los experimentos.

Todo esto ha llevado a una crisis de replicación en las ciencias sociales. Aquí un resumen bastante exhaustivo junto con algunas propuestas de control. Yo consulto sistemáticamente estas dos iniciativas.

- Replication Network, contiene una voluminosa base de datos sobre replicaciones de estudios famosos. No todos salen bien librados, aquí un ejemplito de caza mayor (débiles de corazón, abstenerse).

- Data Colada, contiene hasta la fecha 99 replicaciones de trabajos publicados. La última entrada maltrata -me temo que con razón- el artículo más citado en el 2019 del QJE, la revista con mayor índice de impacto en economía. Más caza mayor (a nivel más chusco, parece que un artículo sobre la honestidad no era del todo honesto... ver entrada 98... hum...).

Una de las medidas que se han propuesto es que las revistas acepten o rechacen los artículos antes de que se lleve a cabo el experimento, para que no haya sesgo de publicación reduciendo los incentivos perversos a publicar sólo lo que ofrece resultados positivos. Además, como hemos visto, cada vez hay más libros y revistas que publican estudios en los que la replicación juega un papel fundamental. Así el recientísimo Journal of Comments and Replications in Economics.

¿Resultados? Una posible víctima es la "Falacia de la Conjunción" en la que la probabilidad de una parte sería mayor que la del todo (ya Kahneman y Tversky vieron que el efecto se desvanecía cuando la pregunta se hacía de manera más "intuitiva"). Y otros trabajos apuntan a que la evidencia a favor de "Nudges" y "Loss Aversion" es menos fuerte de lo que parecía hace unos años. En cambio, la evidencia sobre la importancia de las preferencias sociales, los sesgos en la comunicación y la identidad es mucho más fuerte. Todo esto nos dice que, con trabajo muy serio, los experimentos están mejorando nuestro conocimiento de cómo funcionan los elementos básicos de las economías del mundo real. Pero también que no es oro todo lo que reluce y que hay que tomar con muchísimo cuidado los resultados de cualquier cosa que se publique. Para criticar a la economía es necesario un criterio basado en la lectura y la práctica de lo que se hace en la frontera en donde se encontrará abundante material para la crítica. La que está basada en algún manual de grado la verdad es que nos hace sonreír (por decir algo agradable).

Resumen, de una vez

La economía avanza a gran velocidad y no es fácil discernir su estado actual. Pero es fácil declamar sobre su irrelevancia con lo que quizá sólo se está demostrando la incapacidad para seguirla y, lo que es peor, para entenderla. Así que a cualquiera que se presente como un economista "crítico" yo le haría las siguientes preguntas: ¿Qué te parece la economía experimental? Y ¿cómo ves las replicaciones de trabajos famosos que se están haciendo? ¿Qué artículo de una revista “top five” o de las líderes en tu campo te ha gustado más (o menos) en el último año? Si no hay respuesta inteligente, por favor no hacer ni caso.


[1]Agradezco a Carmen Beviá, David Jiménez-Gómez y Juan D. Moreno-Ternero sus comentarios a una versión preliminar de este trabajo. Yo soy el único responsable de las opiniones aquí vertidas.

[2]Las frases entre comillas están sacadas de la página web de la academia sueca.

por Luis Corchón Díaz