13-Benjamín Forcano, Benjamín Forcano es sacerdote y teólogo de la Iglesia Católica. Lleva más de 40 años en la brecha de la liberación. Nacido en 1935 en Anento (Zaragoza)
"No hay duda de que la sociedad capitalista es una sociedad enferma, llena de contradicciones. Pero la raíz del mal está en que el capitalismo hace imposible una ética personal y comunitaria y corrompe las actitudes y los valores más genuinos del ser humano. Todos sabemos cómo la orientación hoy más arraigada en sociedad y en la cultura es la que pretende hacernos creer que la felicidad consiste en tener: adquirir propiedades, cosas, lucrar, conseguir poder. Eso es producto de la estructura y cultura más estrictamente capitalistas y, sin embargo, lo consideramos como lo más natural. Ser egoístas, avaros, soberbios, dominantes, lo consideramos indicadores de nuestra identidad humana. Pienso que esta orientación es antinatural, pues la realización de la persona no está en el tener sino en el ser . Los grandes valores no se desarrollan en el servicio al dinero sino en ser justos y fraternos, crear relaciones de amor y liberación, no ser frívolos ni insensibles al sufrimiento ajeno, no vivir pendientes del reconocimiento y del aplauso social, dedicarse a satisfacer las necesidades primarias de los seres humanos y luchar para suprimir todo cuanto los hace sufrir. Esas son las señas que constituyen la auténtica identidad humana."
14-Antoni Gutiérrez-Rubí,Asesor de comunicación y consultor político. (http://www.gutierrez-rubi.es/). Miembro de las principales asociaciones profesionales como ADECEC (Asociación de Empresas Consultoras en Relaciones Públicas y Comunicación)
"El espíritu originario de la política solo podrá recuperarse con una política más espiritual, moral y responsable. Es decir: personas (políticos, políticas) con mayor calidad de vida interior; prácticas políticas más coherentes y transparentes; y propuestas más responsables, de nueva civilidad. No hay tiempo que perder. La caída libre de legitimidad es crítica y aguda. La reacción debe ser contundente y ejemplar. Está en juego que la política sea la solución o el problema, por su complicidad, debilidad y falta de autoridad. Está en juego la autoridad democrática porque la política ha perdido la autoritas moral. El deterioro es inequívoco. Un nuevo compromiso entre la política formal y la ciudadanía, una segunda oportunidad de relegitimización, a través de un rearme moral y ético de la práctica política, es imprescindible. La vigilancia democrática que la ciudadanía crítica hace de la política formal es, y con razón, dura y sin contemplaciones. Merecida. Excesiva, a veces. Injusta, en algunas ocasiones. Peligrosamente generalista y estigmatizada, también. Pero no es exigible mayor responsabilidad a la ciudadanía por parte de quien no ha comprendido, con todas sus consecuencias, la indignación que provoca, la urticaria democrática que genera una política ausente, ciega, sorda y muda."
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15-María Elena Ferrer, Estudió Arquitectura en la Universidad Central de Venezuela y luego de 15 años como Directora de Arte y Efectos Especiales para cine y T.V., orienta su vida profesional hacia el desarrollo integral del ser humano formándose como coach y rebirther en Venezuela y Estados Unidos. Está convencida de que el ser humano puede transformarse a sí mismo aún más sorprendentemente que como lo hace con el medio ambiente que le rodea
"La sociedad dominante requiere de personas que cooperen dócilmente en grupos numerosos que quieran consumir más y más, cuyos gustos estén estandarizados y que puedan ser fácilmente influidos y anticipados. Esta sociedad lacerada necesita hombres que se sientan libres o independientes y que no obstante estén dispuestos a ser mandados, a hacer lo previsto, a encajar sin roces en la máquina social. Estos hombres que son guiados sin fuerza, conducidos sin líderes, impulsados sin ninguna meta, salvo la de continuar un andar sin sentido, son los autómatas que describe Erich Fromm en “El Corazón del Hombre”. Pero el movimiento por el cambio global se está abriendo paso a pesar de los antiguos protagonistas y de los autómatas. La evolución sigue su curso no importa cuánto nos esforcemos por detenerla. Lo vemos en la influencia que las redes sociales e Internet están teniendo sobre nuestros hábitos de vida y consumo, en la política, en la Primavera Árabe, o, al momento de escribir estas líneas, la SpanishRevolution."
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